Esta tarde, mi amiga Rosa Chinchilla ha publicado un comentario y lo ha ilustrado con nada más que "insubordination", aquella icónica canción de una de las bandas más legendarias de nuestra pasada adolescencia. Me he detenido a leerlo y al mismo tiempo, siento la nostalgia de Rosa por la ausencia de su madre, quien falleció hace algunos años atrás. Ella escribió: "Mi mamá escuchaba esta canción y decía que se imaginaba una manada de locos bailando.... No estaba tan equivocada (pd. ¡qué bueno ver a estos hdps en vivo!). El leer esto, obviamente te mueve automáticamente muchas fibras y te trae a colación recuerdos varios, que estaban guardados en la última gaveta de mente.
Entre las cosas que recordaba, precisamente había algo que calzaba con lo que había Doña Carmen. Guardado entre olvidados backup's, dormía el sueño de los justos; una grabación del baile de locos (Mosh pit) que suscitó con la primera canción de Voodoo Glow Skulls en su primer concierto en Costa Rica, la cual fue precisamente "Insubordination". Como sí se tratase de esas filmaciones de extraterrestres dudosas, reflexioné un buen rato, tratando de decidir sí lo compartía o no, ya que no se distingue casi nada y el sonido era pésimo. ¿Qué podía esperarse de la tecnología de los teléfonos celulares en el 2006? No obstante, luego pensé que al menos se podía apreciar el vórtice humano que se mueve violentamente, en donde decenas de cabezas se movían como hormigas al son del ritmo demente de los Brillantes Esqueletos del Voodoo. Doña Carmen tenía razón.
Una breve edición, una efímera subida al youtube y estaba listo para compartirse, bajo la siguiente leyenda: "Sí, ya sé que se ve horrible y que no se oye un carajo... Al menos, me
quedaron 36 segundos de vídeo de ese mítico concierto para contar el
cuento".
A.
